COL CHINA

Parecida a una acelga, sus hojas verdes y sus tallos blancos se utilizan en la cocina asiática, en especial la cocina china Cantón. Suelen prepararse cocidas o en encurtidos, separando las hojas verdes de los tallos. En un salteado los tallo han de cortarse en juliana y hervir las hojas durante 2 minutos antes de ser cocinadas. Una receta rápida sería cortar las hojas muy finas y cocerlas por un intervalo de 3-4 minutos. Se sirven con salsa de soja y semillas de sésamo ligeramente tostadas.

Es una verdura originaria Extremo Oriente tan antigua como el Neolítico. Se cultiva en China hace más de 1.500 años, de hecho formaba parte de la dieta culinaria de los chinos del sur en el siglo V. Fue introducida en Japón desde finales del siglo XIX. En los últimos años su consumo y producción han experimentado una difusión paulatina a los países de Europa y América.

Las coles chinas contienen glucosinolatos. Estos compuestos han sido reportados para prevenir el cáncer en pequeñas dosis, pero a dosis muy elevadas resultan tóxicos para los seres humanos.

Presentación: Pieza.

Conservación: de 2 a 6 grados en el frigorífico.

Consejo: Separar las hojas y lavarlas por separado. Las hojas cortadas de la planta se pueden mantener hasta 5 días en refrigeración, pasado los 5 días el sabor y la textura de las hojas comienza a deteriorarse. Debido a la alta proporción de agua que poseen las hojas, cuando se les aplica calor, su volumen se reduce hasta aproximadamente la mitad de su tamaño original, por lo que en platos salteados, sopas y preparaciones calientes es necesaria una gran cantidad de hojas.

Disponibilidad: Otoño-Invierno-Primavera.

Enlace de interés: La Col China - Josean Alija